domingo, 17 de marzo de 2013

¿Debemos los guatemaltecos tomar la justicia en nuestras manos?



(Película, La Bodega)
                Los guatemaltecos estamos cansados de ver cada día como la violencia acaba con tantas vidas en tan poco tiempo, diariamente se cobran vidas de ciudadanos que muchas veces están en el lugar equivocado o porque cometieron algún delito o simplemente porque siempre estamos buscando quien nos pague lo que le hicieron a algún familiar o algún conocido, lamentablemente esta es nuestra situación.

            Estamos divididos en 3 clases sociales donde siempre los que tienen el poder son los ricos, los de la clase media sufrimos las consecuencias de la violencia y las personas de escasos recursos en especial los jóvenes, muchas veces les toca robar para sobrevivir o se ven involucrados en las pandillas porque no tienen opción e incluso tienen que matar solo porque es su trabajo.

            Podemos observar que hoy en día es que los ciudadanos guatemaltecos por la misma desesperación en la que viven porque algún familiar o conocido víctima de una violación o un asesinato, buscan tomar la justicia por su mano sin pensar si esto es lo correcto para nuestra sociedad en la que cada día se vuelve más difícil vivir, rodeados de pandillas, asesinos, extorsionadores y violadores.

            Lamentablemente cuando tenemos un arma en nuestras manos, combinado con la ira que sentimos al ver tantos hechos de violencia perpetrados, en nuestra mente se crea la idea de que debemos matar al culpable incluso algunos ciudadanos solo porque tienen un arma o tienen capacidad económica para hacer las cosas lo hacen y genera más violencia en la sociedad.

            Si en realidad queremos un cambio debemos exigir que se haga justicia, hacernos escuchar y sobre todo no quedarnos callados ante tanta violencia debemos denunciar  a los culpables y no bajar la cara por temor, porque solo así generaremos el cambio que necesitamos y hacer que la violencia disminuya, no debemos tomar la justicia por nuestra mano porque esto nos perjudica.

            Cada vez que pensamos en matar a alguien solo porque no pensaron a la hora de hacer un daño, estamos contribuyendo a que la violencia en nuestro país siga creciendo y tendemos a generalizar, pero no sabemos el trasfondo de lo que los llevo a perpetrar este acto de violencia o delincuencial, puede ser porque tienen necesidad y ese es su trabajo o simplemente porque no tiene opción.

            Lo más difícil en esta situación es que aunque actuemos en defensa propia estamos cometiendo un crimen, porque el hecho de que esta persona sea un delincuente no quiere decir que no merezca vivir, no somos quienes para hacer justicia, ni para quitarle la vida a otra persona y además de eso nos quejamos diariamente de la violencia y no somos capaces de discernir lo que pensamos.

            Al hacer nuestra voluntad nosotros nos convertimos en asesinos o delincuentes porque hacemos que las personas paguen por su crimen y no acudimos a las entidades encargadas de hacer que la ley se cumpla, entonces nuestro país nunca va a cambiar porque nosotros vamos a hacer lo que los criminales hacen para deshacernos de seres indeseables para la sociedad.

Andrea Vargas
 1118323

domingo, 3 de marzo de 2013



Alto al Fuego, ¡Almas Inocentes en Peligro!


Lamentablemente en el país existe un alto índice de  muertes violentas por armas de fuego, ya sea por tenencia legal o ilegal de las mismas, lo cierto es que en Guatemala la violencia ha rebasado sus límites y ya es difícil tolerarla al punto que los ciudadanos deciden tomar la justicia por su mano solamente porque tienen un arma en sus manos, pero ¿Debe la violencia hacerse pagar con más violencia?

No podemos seguir tolerando que la sociedad se convierta en una guerra sin cuartel, vivimos en un país con historia sangrienta desde sus orígenes, desde el conflicto armado donde murió gente inocente y derivando hasta el día de hoy en las pandillas juveniles, que asesinan a diestra y siniestra para controlar al país y desafortunadamente las entidades del gobierno no ponen de su parte.

Los mismos índices de la DIGECAM indican que existen armas ilegales dentro del país y no hacen nada para investigar sobre esto. Nosotros como ciudadanos debemos detener la violencia y decir no a las armas, porque tener un arma de fuego en casa es firmar la sentencia de muerte de nuestra familia y de nosotros mismos, al pensar en armas de fuego fomentamos la violencia.

Para evitar la violencia armada, que ha llegado a alcanzar incluso a los niños y adolescentes, primero debemos evitar los juguetes bélicos, videojuegos violentos y las películas y series violentas, porque en el inconsciente de los más pequeños se va formando la idea que teniendo un arma y matando sin control se puede lograr el éxito y que mediante la violencia se puede obtener poder.

También debemos enseñar a los niños y jóvenes que no es bueno tomar la justicia en mano propia, ya que existen instituciones encargadas de impartir justicia y exigir a las instituciones judiciales que cumplan con su trabajo, aunque hay ciertos casos que quedan impunes. Si tenemos hijos lo mejor es no tener armas en casa, ¿Por qué?  Es sencillo los niños son inocentes y existen personas maliciosas que les dirán que jugar con armas es bueno y ellos lo van a creer.

Las armas no son juguetes, son instrumentos hechos por el hombre para matar y lamentablemente existen personas inconscientes que incluso enseñan a sus hijos a utilizar las armas de fuego, esto es sumamente irracional porque están arrastrando la vida de sus hijos a las garras de la perdición y de la muerte, las armas deberían estar bajo tierra o no existir porque nos perjudican.

Los guatemaltecos con armas somos como niños, en realidad no tenemos la madurez suficiente para entender la gravedad del asunto, creemos que esto es un juego y queremos ser los “vengadores”, pero, ¿Realmente queremos que siga corriendo la sangre?, estamos dispuestos a matar pero no soportamos la pérdida de un ser querido por el uso de armas de fuego.

Por otro lado, están aquellos que por querer demostrar que tienen al “toro por los cuernos”, disparan al aire y la verdad es que no se ponen a pensar, que hay niños jugando en las calles o que sus propios hijos podrían verlos cargar el arma o ver donde la tienen guardada y una bala pérdida podría generar un daño lamentable e irreparable, pero estamos cegados por el rencor y el temor.

Las armas son más baratas que los productos de la canasta básica, muchos prefieren morirse de hambre o dejar a sus hijos sin estudio  y comprar un arma para “defensa propia”, debemos cambiar esta situación, para hacer conciencia del peligro de el uso y abuso de las armas de fuego, es necesario crear campañas que informen sobre ellos y en contra de la violencia.

“La violencia no es buena, es algo que va en contra de la naturaleza y no somos quienes para quitarle la vida a otro ser humano, antes de empuñar un arma debemos pensar en las consecuencias que pueden traernos, ya que no sabemos cuándo nos tocará enfrentarnos a un desquiciado que querrá atentar contra nuestra integridad, debemos negarnos rotundamente a utilizar la violencia”. (Andrea Vargas)


Andrea Vargas
1118323